jueves, 4 de abril de 2013

La voz del Papa Francisco en la mañana de Pascua



Queridos hermanos en el Señor, La voz del Papa es importante. La voz del Papa es la voz del pastor que camina junto al rebaño de Cristo. Durante las próximas semanas me gustaría compartir contigo algunos textos del Papa Francisco; estos son textos breves pero con mucha fuerza. El texto del reverso (inglés) es el saludo de él a la gente que estaba en la plaza de san Pedro para recibir la bendición Urbi et Orbe; el que copio a continuación es el de la segunda  Audiencia general y la primera de sus catequesis del Año de la Fe.

«(…) En las profesiones de fe del Nuevo Testamento, como testigos de la Resurrección se recuerda solo a los hombres, a los Apóstoles, pero no a las mujeres. Esto se debe a que, de acuerdo con la ley judía de la época, las mujeres y los niños no podían dar un testimonio fiable, creíble. En los evangelios, sin embargo, las mujeres tienen un papel primordial, fundamental. Aquí podemos ver un elemento a favor de la historicidad de la resurrección: si se tratara de un hecho inventado, en el contexto de aquel tiempo, no hubiera estado ligado al testimonio de las mujeres. Los evangelistas sin embargo, narran simplemente lo que sucedió: las mujeres son las primeras testigos. Esto nos dice que Dios no escoge según los criterios humanos: los primeros testigos del nacimiento de Jesús son los pastores, gente sencilla y humilde; los primeros testigos de la resurrección son las mujeres. Y esto es hermoso. ¡Y esto es un poco la misión de las madres, de las mujeres! Dar testimonio a sus hijos, a sus nietos, que Jesús está vivo, que es la vida, que resucitó. ¡Mamás y mujeres, adelante con este testimonio! Para Dios cuenta el corazón, el cuánto estamos abiertos a Él, si acaso somos como niños que se confían (…)He visto que hay muchos jóvenes en la plaza. A ustedes les digo: lleven esta certeza: el Señor está vivo y camina con nosotros en la vida. ¡Esta es su misión! Lleven adelante esta esperanza: este ancla que está en los cielos; mantengan fuerte la cuerda, manténganse anclados y lleven la esperanza. Ustedes, testigos de Jesús, den testimonio de que Jesús está vivo y esto nos dará esperanza, dará esperanza a este mundo un poco envejecido por las guerras, por el mal, por el pecado. ¡Adelante, jóvenes!»

No hay comentarios: